
En la esquina de las calles Monseñor de Andrea y Catamarca está la primera salita veterinaria de primeros auxilios. Por un costo realmente mínimo, se atiende a las mascotas. Aunque se trata de atenciones primarias. Ya que hay tratamientos que son costosos y no pueden ser afrontados por la sala. Gabriela Meza destacó: “Hay animalitos a los que se les pone dos o tres inyecciones y una pastilla para que siga tomando y todo eso es un costo realmente mínimo que no sale ni “una cerveza” y la gente se queja porque se cobra”.
Gabriela Meza, integrante de AUPA, continuó contando los avatares y vicisitudes que tienen que vivir ellos, las protectoras de animalitos, para sostener ese trabajo tan arduo y realmente interminable. En concreto, se refirió
La salita municipal, el predio es municipal se mantiene con la ayuda de la gente, que hace un aporte mínimo, lo pedimos porque sino la salita no estaría abierta. Se usa para comprar insumos y pagar a la médica veterinaria. También contamos con algunos aportes que recibe la asociación. Tenemos un número de cuenta y hay algunas personas, no muchas, que colaboran y vivimos juntando de a peso para pagar a la veterinaria como corresponde, para comprar los insumos. Es un trabajo donde estamos todo el día viendo cómo vamos a distribuir ese dinero que vamos juntando para seguir sosteniendo. Es un stress que tenemos nosotros con el tema de mantener esa salita para la Municipalidad. Mucha gente se ha quejado de que se cobra. Pero se cobra un costo mínimo. Es irrisorio para todo lo que recibe el animal en ese momento. Hay animalitos a los que se les pone dos o tres inyecciones y una pastilla para que siga tomando y todo eso es un costo realmente mínimo que no sale ni “una cerveza” y la gente se queja porque se cobra”.
“La verdad es que la gente tendría que aprovechar y ayudar a AUPA. Que la gente con más recursos diga: “voy a donar a la Asociación, algo, para que se siga sosteniendo esa sala. La verdad es que la sostenemos a pulmón. Pasamos momentos de muchos nervios cuando no sabíamos si la teníamos que cerrar o no. Y en vez de atacar a la Asociación deberían apoyar a AUPA, que sigue sosteniéndose y que ha pasado por todos los gobiernos. AUPA no tiene una bandera política. AUPA está con la sociedad. Y nosotros agradecemos a los intendentes de los distintos partidos que han pasado y que todos nos han acompañado. Eso es muy importante valorar porque se dieron cuenta de que AUPA hace un trabajo social más allá de las banderías políticas”, recalcó..