Causó conmoción y hondo dolor en la Ciudad de Goya el trágico fallecimiento de un pequeño perro de raza indefinida criolla a manos de un Pitbull de gran tamaño.
El incidente fue presenciado por los propietarios del can, quienes se vieron impotentes ante el brutal ataque. Sorprendentemente, tanto el dueño del Pitbull como el propio animal no han sido encontrados.
El perro atacado, llamado Batata, no tuvo oportunidad de defenderse ante el poderoso ataque de esta raza de perros, que aparentemente estaba siendo criada en el lugar donde se encontraba Batata. El Pitbull logró entrar al terreno a través de una abertura en un tejido. Sin duda, este incidente no hubiera pasado desapercibido de no ser por los esfuerzos de los propietarios de Batata, quienes ahora buscan justicia e intentan identificar al dueño del Pitbull.
Esta semana, un grupo de personas, entre ellas la señora Liliana Lupani y la propietaria de Batata, la señora Candelaria Revolta, se presentaron con un abogado para iniciar un proceso legal y reclamar justicia en la investigación del incidente. Según el abogado querellante, Hermidio Gonzalez es necesario investigar si el Pitbull estaba siendo utilizado para peleas clandestinas, así como si existen otros animales de la misma raza que están siendo entrenados para atacar a otros perros en estas llamadas peleas ilegales.
CLARO HECHO DE CRUELDAD
El tema fue abordado en el noticiero “Gigared Noticias”, el abogado querellante Gonzalez dijo: “Estamos ante un claro hecho de crueldad animal. Donde un animal cuyo dueño no cumplimenta con los requisitos exigidos para la tenencia del mismo es utilizado como una especie de arma o instrumento de agresión contra otro animal de condiciones totalmente diferente. Lo que coloca en miras al titular de ese animal agresor de la figura penal del artículo 340 bis del Código penal y es lo que solicitamos en esta constitución de querellante conjunto”.
“Sabemos de la existencia de animales de distinto tipo y especie, algunos que revisten la entidad de domésticos y otros que por su calificación requiere condiciones. Hay una ley específica para esa tenencia”.
“Los dueños del animal agresor, en función del bienestar general de toda la población en general y de los demás animales convivientes requieren que se cumpla con estas normativas. Ante la ausencia en el cumplimiento de estas normativas se producen estos hechos”.
HAY RESPONSABILIDAD DEL DUEÑO
“Por lo tanto advertimos con toda claridad la responsabilidad del titular de este animal que encima hasta la fecha no es encontrado, la Justicia no tiene conocimiento dónde estaría y tenemos sospechas de que existen otros animales que a la par de este estén siendo adiestrados con conductas agresivas. Vaya a saber uno con qué finalidad. Lo cierto es que la Justicia también debe investigar eso, por una cuestión ya no solamente particular sino de interés general. Goya necesita saber si hay lugares donde se adiestran animales con esta gravedad, que puedan llevar adelantes ataques tan criminales como el que se llevó adelante contra Batata que es el hijo de Candelaria”, dijo.
HIJOS CANINOS EN PELIGRO
“Estos animales, al estar en la calle generan una situación de peligro general donde está toda la comunidad y los hijos caninos de toda la comunidad que pueden ser víctimas de estos ataques. Entonces, me parece que no podemos dejar ver al Derecho Penal que debe avanzar con sus reproches, que es la instancia necesaria a la que vamos a recurrir para que se aplique la normativa, concretamente del articulo 340 bis”, dijo el abogado Gonzalez.
“Batata fue víctima de un hecho criminal”, aseguró
“Va a sentar jurisprudencia, estos seres tienen sentimiento, que conviven con la familia no pueden ser simples objetos que cualquier persona con la utilización de cualquier instrumento, en este caso un perro con características especiales, que hasta que no lo encontremos, yo tengo la sospecha de que fue adiestrado y de que esa fue una conducta tendiente a demostrar si el perro agresor está preparado para vaya a saber qué fin. Entonces, lo liberan a la via pública para que lleve a cabo el ataque para cuantificar la agresividad y la peligrosidad de estos instrumentos asesinos que crian”, dijo el letrado.
UN CUADRO ESPANTOSO
La señora Liliana Lupani contó: “Fui testigo, de cuando Candelaria con gritos desesperados corría a ver y realmente tengo una imagen en los ojos, una imagen monstruosa. Porque era realmente como un monstruo ensañándose, ya estaba prácticamente muerto Batata y el perro destrozándolo como tratando de devorarlo, ensañándose con el cuerpecito”.