A una semana del inicio de la invasión de Rusia a Ucrania, las tropas de Vladimir Putin buscan continuar su embestida sobre las dos ciudades más importantes: Járkov y Kiev. En esta última se registraron bombardeos y sonaron las alarmas durante este jueves.
En la jornada de ayer, el ejército invasor tomó la central nuclear más grande de Ucrania y destruyó una universidad en la segunda ciudad más grande del país europeo. El presidente ucraniano, Volodomir Zelensky, cifró las pérdidas rusas en cerca de 9.000 soldados y ya son más de un millón los civiles que huyeron de Ucrania.
Este jueves comenzará la segunda ronda de negociaciones para buscar un alto al fuego. En este caso se realizará en la región de Brest, en la frontera con Polonia y Ucrania.
A su vez, la Asamblea General de la ONU exigió ayer -con 141 votos a favor y cinco en contra- que Rusia retire las tropas de Ucrania. Argentina votó a favor de la resolución propuesta por Ucrania.
El presidente de Ucrania, Volodomir Zelensky, salió a responderle al Kremlin luego de que afirmaran que, pese a las negociaciones que se realizarán este jueves, continuarán con la ofensiva “hasta cumplir los objetivos”.
“No tenemos nada que perder más que nuestra propia libertad y nuestra dignidad. Ese es nuestro mayor tesoro”, afirmó Zelensky en un discurso a los ciudadanos ucranianos.
El presidente de Ucrania apuntó contra Rusia a menos de dos horas de la segunda ronda de negociaciones: “¡Váyanse! ¡Váyanse a su casa!”.