El expresidente presentó un escrito y no contestó preguntas. Sostuvo que su expareja busca un "beneficio económico".
Alberto Fernández fue indagado este martes en los tribunales de Comodoro Py en el marco de la causa por violencia de género contra la ex primera dama Fabiola Yañez. Luego de varias postergaciones, el expresidente se negó a responder preguntas frente al juez Julián Ercolini, pero presentó un escrito en el que apuntó contra expareja y la acusó de buscar un "beneficio económico".
Fernández llegó hoy a los tribunales a las 10 acompañado por su custodia. Ingresó por el subsuelo y luego se dirigió al cuarto piso. Se retiró a las 11:25 sin dar declaraciones a la prensa y en medio de un fuerte operativo de seguridad.
Primero, la defensa de Fernández, a cargo de la abogada Silvina Carreira, presentó un escrito en el que negó las acusaciones de violencia de género.
Luego, al momento de la indagatoria, el expresidente realizó una breve exposición en la cual explicó por qué no iba a responder preguntas y objetó la intervención en el caso tanto del juez Ercolini como del fiscal federal Ramiro González.
Según su punto de vista, el Juzgado no es "competente" para llevar adelante el caso y el mismo debe ser investigado en la justicia federal de San Martín porque los hechos denunciados ocurrieron en la quinta de Olivos.
El clima fue tenso. El lunes, en la previa de la citación, Fernández presentó por medio de sus abogados numerosos recursos para suspender la audiencia por tercera vez, en esta oportunidad, sin éxito.
De igual manera, ayer volvió a pedir que Ercolini sea apartado de la causa Seguros, donde se investiga al expresidente por corrupción durante su Gobierno. “Me detesta y me quiere preso”, sostuvo Fernández, quien además presentó chats del 2017 y 2018 con el juez para plantear que eran amigos y no puede investigarlo.