"¿Tampoco se puede reclamar en la vereda? ¿Dónde estamos?", grita un hombre en la cara de uno de los efectivos, mientras las fuerzas de Seguridad protagonizan un nuevo episodio represivo.
En un nuevo vergonzoso episodio de represión, Gendarmería y Prefectura avanzan sobre los jubilados y los hinchas de diferentes clubes que se hicieron presentes este miércoles en el Congreso para protestar contra el ajuste de Javier Milei.
Con un camión hidrante de la Policía Federal, las autoridades intentan quitar a las personas de la vía pública. Además, formados en filas de motos policiales, los efectivos avanzan con gases lacrimógenos y gas pimienta, con el único objetivo de reprimir a quienes se manifiestan de manera pacífica.
"¿Tampoco se puede reclamar en la vereda? ¿Dónde estamos?", se escuchó decir a un manifestante mientras era corrido por efectivos de las fuerzas de Seguridad, que responden al protocolo establecido por Patricia Bullrich.
Durante la protesta también se vivieron momentos de tensión cuando los efectivos le pegaron un palazo a una mujer que se manifestaba de manera pacífica.
Inmediatamente, la jubilada debió ser asistida por quienes allí se encontraban, de acuerdo a lo que muestra el video compartido en redes sociales por el periodista Lautaro Maislin de C5N.
La Policía Federal contestó con balas de goma y gases lacrimógenos a las piedras y protestas sobre la calle Hipólito Yrigoyen y los hicieron retroceder por la avenida Entre Ríos.
Mientras tanto, Gendarmería avanzó con un camión hidrante para disipar a manifestantes y cerca de las 17 de este miércoles la marcha -que había comenzado de manera pacífica con el apoyo a los jubilados, como cada miércoles- ya había sido disipada.
A diferencia de otros miércoles, durante la marcha de esta jornada estuvieron presentes miembros de las hinchadas de varios clubes de fútbol en un intento por robustecer las filas de los jubilados en su reclamo al Gobierno de Javier Milei por los recortes en sus haberes, servicios y cobertura médica.
Pero la presencia de manifestantes más jóvenes no sirvió de nada cuando empezó a expandirse la nube de los gases lacrimógenos, como se percibió en las imágenes transmitidas por el canal C5N desde el Congreso.
Hasta el momento no se registraron detenidos -como sí ocurrió en las marchas anteriores- pero sí hubo cientos de afectados por el aire contaminado.