Será una experienca inédita en Argentina: dos trabajadores, de noche y dos días antes del Censo Nacional -el 16 de mayo-, se encargarán especialmente de hacer el cuestionario a las personas que viven a la intemperie.
Cómo era antes y por qué se supone que había un subregistro.
"Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada."
Así describió el escritor Eduardo Galeano en su célebre poema a las personas que apenas poseen su vida --o su superviviencia-- y que suelen ser mirados con desprecio por una parte de la sociedad que tiene cosas, familia, techo y trabajo.
Este año se hace el Censo 2022 para que los argentinos sepamos cuántos somos, quiénes somos y cómo vivimos.
La buena noticia es que por primera vez en la historia, el Estado pone sus recursos a disposición para que la gente en situación de calle sea censada en el marco un operativo especial.
Según aseguró a Télam, Pablo Ceballos, Director Nacional del Sistema Estadístico Nacional, en esta ocasión "se va a hacer un operativo especial en los 31 aglomerados donde hace la Encuesta Permanente de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos para relevar a la gente en situación de calle".
Va ser de noche, dos días antes del Censo propiamente dicho (el 16 de mayo) y los trabajadores van a ir a de a dos: un censista y un operador social que se van a mover en un vehículo con un chofer para "barrer" las cuadras.
Cómo era antes
Hasta ahora, cada censo arrojaba una cifra de gente en situación de calle que se estima tenía un subregistro porque no estaba organizado específicamente el protocolo para abordar a esta población: el mismo censista que tenía que tocar timbres en una cantidad equis de manzanas, si veía a una persona viviendo en la calle sólo tenía que anotarla. Ahora, las cosas son distintas. Por suerte.
El operativo especial
Ceballos contó que el 15 de mayo a partir de las 20 horas, horario en el que la gente que vive en la calle deja de deambular para establecerse en el lugar en el que va a dormir, en todo el país y en grupos integrados por dos personas, los censistas van a "barrer" los 31 conglomerados del país que mide la EPH para buscar específicamente a quienes están viviendo a la imtemperie.
Es gente que se mueve mucho y por eso se hace de noche y con un chofer. Cada conglomerado, en función de su población total, va a tener asignado un número determinado de equipos. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por ejemplo, van a trabajar 74 grupos. La idea es cubrir cada barrio con dos equipos.
"Lo que marca la vida cotidiana es que hay un 30% más de gente en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires desde la pandemia", dijo a Télam Horacio Ávila, referetente de Proyecto 7, una institución que se encarga del abordaje integral de las personas que sufren esta problemática.
"Antes de la pandemia, había 7.251 personas entre refugios y gente durmiendo en la calle. El año pasado, salieron a dar un número oficial porque nosotros no quisimos censar y lo terminaron haciendo solos. Les dio que hay 2.500 personas viviendo en la calle y, siempre les daba 1.000. No avalamos para nada esos números, pero es importante que reconozcan un 100% de aumento", afirmó.
Las preguntas y el abordaje
El cuestionario va a ser el mismo que para la gente que vive bajo techo. El único bloque de preguntas que no se van a hacer, obviamente, son las relacionadas a vivienda.
Claro que no es lo mismo el acercamiento a una persona que vive en un barrio cerrado al que debe hacerse con una persona que hace años vive a la intemperie y tal vez no esté siquiera en condiciones de contestar, no precisamente por falta de voluntad, sino debido a la infinidad de problemas derivados de sobrevivir en esas condiciones.
El operador social dispuesto para el operativo será el encargado de establecer cómo acercarse a esta población sin que se sienta invadida o amenazada y preguntarle en primer término si quiere responder el cuestionario.
El Censo en los paradores
Una cantidad de personas que no tienen dónde vivir encuentra refugio en los paradores. En ese caso, el censo 2022 se hará digital. "Para nosotros un parador es una vivienda colectiva", explicó Ceballos.
Será en esos casos el o la responsable del parador quien esté a cargo de proveerle los datos al censista.