El 'Chiquito' insistió en que el Polo Obrero pedirá "un paro y plan de lucha", mientras la central sindical va "a dar una vueltita por el centro".
El líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, dijo este sábado que la Unidad Piquetera se manifestará este miércoles para plantear "un paro y plan de lucha", y lanzó una fuerte chicana contra la Confederación General del Trabajo (CGT), que se manifestará el mismo día: "Nosotros vamos a ir a Plaza de Mayo, a diferencia de la CGT, que va a ir a dar una vueltita por el centro", ironizó.
En declaraciones radiales, el 'Chiquito' Belliboni expresó que la casa madre del sindicalismo argentino es "cómplice del ajuste". De hecho, opinó que la movilización gremial "parece más a favor que en contra" del Gobierno de Alberto Fernández.
Lo raro es que, si los trabajadores hacen una movilización tienen que tener una reivindicación ¿Ellos qué piden? Te diría que los veo cómplices de todos los ajustes, pasivos es muy breve", enfatizó el líder social. En concreto, los piqueteros plantean un salario mínimo de 105.000 pesos.
Con ese tono crítico, Belliboni remarcó que "la CGT no está cumpliendo con la principal función que tiene un sindicato o una central obrera, que es defender el poder adquisitivo del salario de sus trabajadores".
Belliboni propone un "plan de lucha"
"Vamos a hacer una movilización a la casa de Gobierno, nosotros tenemos que levantar un pliego de reclamo y salir a luchar con un paro y plan de lucha y no esperar a que los empresarios bajen los precios", manifestó el dirigente de izquierda.
Sobre la polémica en torno a los planes sociales, y las auditorías que dispuso el Gobierno para controlar a los beneficiarios, Belliboni opinó: "El problema de fondo es que se está haciendo una campaña feroz de estigmatización de las organizaciones sociales y de los piqueteros. Nadie es un 'planero'. Es un trabajador que no tiene trabajo, y a nadie le gusta vivir de un plan social".
La protesta de las agrupaciones piqueteras se anuncia después del acampe desarrollado el último miércoles junto al Ministerio de Economía, cuando exigieron ser recibidos por el flamante ministro, Sergio Massa.