El joven repartidor había denunciado la falta de seguridad en Moreno pocas horas antes de ser atacado cuando intentaba defender a un comerciante.
La localidad bonaerense de Moreno vuelve a ser escenario de un brutal crimen que refleja la creciente ola de inseguridad. Lucas Aguilar, un joven de 20 años que trabajaba como delivery, fue asesinado este jueves tras recibir siete puñaladas al intentar defender a un vendedor ambulante durante una discusión callejera.
Lo más impactante es que, apenas unas horas antes, había denunciado en televisión la falta de seguridad en la zona y los reiterados ataques que sufren los repartidores. El episodio fatal ocurrió mientras Aguilar realizaba su jornada laboral.