El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acudió a observar el evento en Mazatlán, donde afirmó que es “un fenómeno astronómico único” que se apreciará en esta urbe “como en ninguna otra parte en el mundo. Es el centro, el punto más importante para observar este fenómeno”.
El eclipse -en todo su ciclo- dura 310 minutos (algo más de 5 horas) y se puede observar desde Mazatlán, en México, hasta la costa este de Canadá pasando por Estados Unidos.
El espectáculo, magnífico, oscurece rápidamente los cielos, baja la temperatura varios grados, y silencia a los pájaros. No en vano, estos eventos atraen a miles de turistas de todo el mundo.
De hecho, en algunas regiones, como Niágara Falls, las autoridades canadienses han declarado el estado de emergencia ante la previsión de turistas que fue a disfrutarlo.
El fenómeno es visible como parcial en el resto de Norteamérica, en América Central, Islandia, las Azores, Madeira y el oeste de Reino Unido, además de las Canarias y el noroeste peninsular.