Subrayó que Rusia ha declarado en repetidas ocasiones que está dispuesta a mantener negociaciones, pero teniendo en cuenta la realidad actual.
Si los aliados occidentales del régimen de Kiev quieren resolver la crisis ucraniana en el campo de batalla, Moscú está preparada, declaró este lunes el ministro de Asuntos Exteriores ruso en funciones, Serguéi Lavrov.
"Es su derecho, si lo quieren en el campo de batalla, será en el campo de batalla", dijo, añadiendo que Moscú ha declarado en repetidas ocasiones que está dispuesta a negociar para resolver el conflicto, pero teniendo en cuenta la realidad actual.
Además, comentando el foro internacional de alto nivel previsto a celebrarse en Suiza el 16 y 17 de junio, en el que se abordará el plan de paz para Ucrania, el canciller ruso señaló que este evento "se reducirá a formular una vez más un ultimátum a Rusia", subrayando que "esta no es forma de hablar con nadie, y especialmente con nosotros".
Según sus palabras, este evento se centra en la 'fórmula de paz' de Vladímir Zelenski, pero ignora otras iniciativas como la de China. "Como sede de las conversaciones de paz, Suiza ya no es muy adecuada. Suiza solía ser un país realmente neutral. Ahora Suiza se ha puesto inequívocamente del lado de Ucrania", añadió.
Según el canciller ruso, la conferencia se centrará en la fórmula del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, pero ignorará otras iniciativas disponibles, incluida la de China, que, según Lavrov, es "la más completa".
El ministro recordó que Moscú ha dicho en repetidas ocasiones que está dispuesto a negociar un acuerdo, pero "teniendo en cuenta el reconocimiento de las realidades que han surgido".
"La conferencia (...) se reduce a formular una vez más un ultimátum a Rusia. Como a un mal estudiante, el consejo de profesores lo expone, deciden todo entre ellos, luego lo llaman y anuncian el veredicto: no se le puede hablar a cualquiera así, especialmente a nosotros”, explicó Lavrov.