Según el último informe de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), el intercambio comercial entre Argentina y Brasil alcanzó los 1.969 millones de dólares en junio de 2024, lo que representa una disminución del 31,6% en comparación con el mismo mes del año anterior. Esta reducción también se observó respecto a mayo de 2024, con una caída del 11,1% debido a menores importaciones y exportaciones. Este factor, tal como venimos hablando en las columnas sobre Sudamérica, es clave. La pérdida de interdependencia entre los gigantes sudamericanos.
No obstante, las exportaciones argentinas a Brasil experimentaron un crecimiento interanual del 8,8% en junio de 2024, alcanzando los USD 1.009 millones. Esta tendencia positiva se mantiene desde marzo de 2024. Por otro lado, las importaciones desde Brasil disminuyeron un 50,8% en el mismo período, totalizando USD 960 millones. En consecuencia, Argentina registró un superávit comercial de USD 49 millones en junio.
En el acumulado de los primeros seis meses de 2024, el saldo comercial para Argentina fue positivo en USD 107 millones (CAC, 2024). Este resultado se debe al aumento del 2,4% en las exportaciones y a la disminución del 36,7% en las importaciones desde Brasil en comparación con el mismo período de 2023 (CAC, 2024).
El aumento en las exportaciones argentinas a Brasil durante junio (8,8%) se debió principalmente a mayores ventas de trigo y centeno sin moler, vehículos de carga y especiales, polímeros de etileno y petróleo crudo (CAC, 2024). Por otro lado, la disminución en las importaciones argentinas (50,8%) se atribuyó a menores compras de soja, autopartes, productos semiacabados de hierro y acero, y diversos tipos de laminados de este material (CAC, 2024).
Por otro lado, en base al Centro de Economía Internacional (CEI) de la Cancillería argentina, Brasil es el segundo socio en exportaciones de Servicios Basados en el Conocimiento (SBC). Aún no contamos con datos oficiales respecto al 2024, pero en un estudio sobre los datos de SBC del 2023 del CEI, el país vecino fue el segundo socio comercial por USD 1.905 millones, con un crecimiento del 27,6% de las exportaciones.
¿Cómo impacta la situación en Brasil?
La pérdida de dinamismo comercial afecta a dos sectores clave de la economía brasileña. El sector primario, que había ganado posiciones durante el 2023 debido a La Niña, se vio afectado por la llegada de El Niño a finales del 2023 y principios del 2024. Esto redujo la dependencia del agro argentino de Brasil, lo que provocó una disminución de las exportaciones brasileñas. En el caso del complejo sojero, las exportaciones cayeron de USD 1.548 millones a solo USD 61,6 millones (Estadao, 2024).
Respecto a la industria, el sector automotriz brasileño sufrió la recesión de Argentina. Según datos relevados por Estado, sobre la base del Ministerio de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios de Brasil, la exportación de vehículos de pasajeros al mercado argentino pasó de USD 858 millones en el primer semestre de 2023 a USD 734 millones durante el mismo período en 2024.
Tal vez el dato más alarmante para el MERCOSUR sea la pérdida de relevancia de Argentina frente a China y los EE.UU. en las exportaciones brasileñas. China hoy representa el 30% de las exportaciones brasileñas, y los EE.UU. el 18%. En tercer lugar, y compitiendo con Países Bajos (3,3%) y España (3%) se encuentra Argentina (3,5%).
El statu quo y sus impactos para ambos países
El punto clave del análisis comercial hecho, recae en los menores costos que tiene Brasil para elevar las tensiones con Argentina ante un escenario que no cumpla con sus intereses nacionales. La contracara es que Brasil tiene menores incentivos para distender la relación bilateral. Por el contrario, para Argentina, Brasil representa el 15% de las exportaciones según el INDEC (2024), y es no clave para el superávit comercial.
A partir de este análisis encontramos otro motivo para visualizar un futuro incierto del MERCOSUR: Argentina sale beneficiada a pesar del peor escenario comercial entre los dos países desde 1991. Con el MERCOSUR bloqueado, Argentina logra aumentar sus ventas a Brasil y reducir las importaciones. Así, respalda la necesidad de diversificar los mercados con un MERCOSUR más laxo, o una agenda externa con más adrenalina.
(FUENTE: ESCENARIO MUNDIAL)