“Hace veinte días no vemos ningún surubí”, aseguraron los pescadores, y en los locales de gastronomía comenzaron a resentir de los precios, elevados por la escasez.
Investigadores de la Unne explicaron que se trata de “una cuestión meramente estacional”.
Pescadores comerciales y deportivos coincidieron en manifestar la faltante de especies mayores en el río Paraná, a lo que los ambientalistas agregaron que se trata de una depredación acompañada por la bajante histórica.
“Hace veinte días que no vemos un surubí”, dijo a El Litoral el referente de la Asociación de Pescadores de Chaco (Asopecha), para referirse al emblemático plato de la gastronomía regional. Además, el precio de la carne de surubí tuvo fluctuaciones en las últimas semanas por la escasez.
“En el restaurante de Paso de la Patria ya no podemos ofrecer surubí hace dos semanas, no hay”, aseguró Rosa Vasque, emprendedora gastronómica. Mientras que en otros locales gastronómicos explicaron que no ofrecen este tipo de plato porque no les conviene comprar pescado a precios tan altos.
Por su parte, el ambientalista correntino Luis Martínez sentenció: “Estamos sacando las pocas especies del río sin tener en cuenta las consecuencias. La falta del surubí en el río es un claro ejemplo de que lo están depredando, aprovechando su vulnerabilidad”. “A todo esto debemos sumar la falta de un adecuado manejo sostenible de estos recursos. Lo que estamos haciendo actualmente es un abuso y uso de los recursos ícticos a través de una extracción sin ningún control”, insistió.
En cambio, el director del Instituto de Ictiología del Nordeste (Inicne), Pablo Roux, descartó que el problema se deba a la depredación, pero sí la vinculó a la bajante del río. “Es una cuestión netamente estacional, los peces son de sangre fría y en estas semanas con temperaturas bajas están en el fondo del río”, explicó.
“El pez fondeó, como se dice en la jerga de los pescadores, tanto el surubí como el dorado y la boga”, dijo el investigador para aclarar el comportamiento de estas especies. De todos modos, insistió en el cuidado de la biodiversidad que debe regir en el río Paraná ante la grave bajante.
El investigador del Inicne también señaló la faltante de alimento para los peces en esta temporada en que presentan metabolismo bajo.