Boca está en las semifinales de la Copa Libertadores. Y como no podía ser de otra manera, lo hizo con la que viene siendo su arma mortal en el último tiempo: sus arqueros ataja-penales. Antes Agustín Rossi, hoy Sergio Romero, quien tapó dos de los remates de Racing en la tanda decisiva, luego de que el 0-0 se mantenga durante 180 minutos.